«Un estilo de vida que priorice la actividad física y la alimentación sana, pero que no castigue ni nos genere estrés mental cuando nos comemos una hamburguesa un día a la semana o pasamos un domingo de sofá y manta»
Por Elizabeth Martí
Con la llegada del verano vuelvo a oír una frase mítica que me ha inspirado a escribir estas líneas: “Ya llego tarde a la operación bikini 2021”.
A estas alturas de la película cuesta entender que sigamos pensando en cambiar nuestra alimentación y nuestras actividades físicas de manera puntual y con un objetivo meramente estético.
Está claro que a todos nos gusta vernos bien, pero ese es uno de los múltiples beneficios de tener un estilo de vida saludable, que sea sostenible en el tiempo.
Un estilo de vida que priorice la actividad física y la alimentación sana, pero que no castigue ni nos genere estrés mental cuando nos comemos una hamburguesa un día a la semana o pasamos un domingo de sofá y manta.
Y mi teoría se ve agravada por la situación actual de la pandemia. Esperamos ansiosamente una vacuna sin darnos cuenta que la mejor medicina y la mejor herramienta de prevención la tenemos a nuestro alcance todos los días
Sentarse es el nuevo fumar
Hace unas semanas leí que múltiples estudios han demostrado que la inactividad física en el cuerpo tiene el mismo efecto que fumarse un paquete y medio de cigarrillos al día. ¿Te das cuenta de lo que significa eso?
Mientras pasas horas y horas sentad@ en tu sofá estás castigando a tu cuerpo y estás aumentando drásticamente el riesgo de obesidad, diabetes, enfermedades de corazón, presión arterial alta, colesterol, incluso ciertos tipos de cáncer (colón, útero, pecho).
Y si además de ser sedentari@ eres fumad@r, el riesgo se multiplica.
Según datos de la OMS, la inactividad física es el cuarto factor de riesgo que más muertes provoca por detrás de la hipertensión (HTA), el tabaco y la hiperglucemia.
un tercio de la población mundial la padece y más de nueve millones de personas acabarán muriendo por sus efectos directos, lo que supone el 13% del total de muertes en el mundo.
Aquellos que piensan que no tienen tiempo para el ejercicio, tarde o temprano tendrán que encontrar tiempo para la enfermedad
Te excusas en que no tienes tiempo para moverte y cuidarte para reforzar tu salud, pero lo que no sabes que todo ese tiempo que no estás invirtiendo ahora lo perderás el día que estés enfermo. O peor el día que una de estas enfermedades te lleve a la tumba.
Ámate lo suficiente para llevar un estilo de vida activo y saludable.
Y si has llegado hasta aquí y sigues pensando en la operación bikini, espero de corazón que no sea demasiado tarde para ti.